Mujer adentro

Estoy convencido de que se escribe siempre desde algún lugar,
  aunque no se escriba en absoluto sobre él (una mujer toma
  impulso mirando la sombra que proyecta cada cuerpo que
  falta).

Creo además que un agujero es el destino turístico de toda
  posibilidad (una mujer salta con los brazos abiertos) e incluso
  diría que un poema sobre una piedra puede parecerse, en su
  forma de contestar, a un poema sobre el aborto.

Una mujer hace puenting dentro del hombre sobre el que estoy
  escribiendo.

 

Woman Inside

As a man I’m convinced that we always write from a particular
  place, though we may not write about it at all (a woman
  gathers momentum as she watches the shadows of missing
  bodies).

I also believe that a hole is the tourist destination with greatest
  potential (a woman jumps arms wide) and I’d go so far as to
  say that a poem about a stone can seem, in its way of talking
  back, a poem about abortion.

A woman goes bungee jumping inside the man about whom I’m
  writing.

 

Trampolín de lo que falta

De la montaña que nos vedaron bajan hombres enloquecidos
  agitando sus manuales de razón trascendental. Ignorarlo es
  agacharse como un desclasado frente al espejo.

Quisiera un apartamento incómodo en todos sus rincones, decorar
  con obstáculos. O vivir un tiempo a oscuras, no exactamente
  abandonada.

Me acuerdo de aquel fotógrafo que compró unos infrarrojos la
  noche que retransmitieron el bombardeo de Bagdad. Y volvió a
  su casa y apagó la luz y se retrató a sí mismo con ellos.

Mi abuela, que cocinaba de oído, se fue quedando sorda. Antes de
  sentarme a escribir, me gusta probarme su tímpano cansado.

 

Stepping-Stone to What’s Missing

From the mountain they forbid us crazed men come down waving
  their manuals of transcendental reason. To ignore it is to bow
  down like an outcast before the mirror.

I wanted an apartment uncomfortable in every corner, to decorate
  with obstacles. Or to live in darkness for a while, not exactly
  abandoned.

I remember that photographer who bought infrared lenses the night
  they rebroadcast the bombing of Baghdad. How he went
  home and turned out the lights and took a self-portrait with
  them.

My grandmother, who cooked by sound, was growing deaf. Before
  sitting down to write, I like to try on her tired eardrum.

 

Los huecos del paisaje

A Ricardo lo mató la máquina.
Era máquina que ronroneaba
como algo a punto de nacer.

Lo conocí cargando palos.
Cuando no había palos, cargaba ladrillos.
Tenía de todo su garaje. Tenía una serradora.
El año que cortaron la alameda,
podías verlo desde aquí
fumando de pie sobre un tronco talado,
él mismo vuelto tronco en la distancia,
reconciliado con el bosque.

Donde estaba Ricardo
queda un bostezo de humo,
aquel dibujo obsceno rayado con navaja
y el tatuaje naíf de su antebrazo:
algo que insiste, apócrifo en el aire,
como el dedo fantasma de un yakuza.

A veces regreso a su cochera
y acaricio la máquina dormida
que nadie quiso llevarse
esperando escuchar el ronroneo.
Le gustaba pellizcarme sin permiso
y la animación japonesa.

 

Holes in the Landscape

Ricardo was killed by the machine.
A machine that vroom vroomed
like something about to be born.

I met him carrying sticks.
When there were no sticks, he carried bricks.
His garage had everything. It had a chainsaw.
The year they cut down the poplar,
you could see him from here
smoking standing over the felled trunk,
a trunk himself in the distance
reconciled with the forest.

Where Ricardo used to be
a yawn of smoke remains,
that obscene razor-scratched drawing
and the rustic tattoo on his forearm:
something that persists, apocryphal on the air,
like the phantom finger of a yakuza.

Sometimes I return to his garage
and caress the sleeping machine
that no one wanted to take
hoping to hear its vroom vroom.
He liked to pinch me without permission
and Japanese animation.

 

Hombre adentro

La tarde bosteza y se desmaquilla
sobre la superficie del pantano.
Justo antes de rendirse, el cielo
arriesga un brillo de celofán
y el aire es una madre de puntillas
que se retira del dormitorio.

¿Por qué vuelven las cosas que se fueron
desordenándolo todo,
igual que una pelota de colores
salida de la nada?

Acabo de romper con una piedra
la pantalla narcótica del agua
y he recordado a aquel demente
que abrió de un golpe su televisión
tratando de sacar al hombrecito
que gritaba allí dentro.

 

Man Inside

The afternoon yawns and washes off her makeup
on the surface of the reservoir.
Before surrendering, the sky
ventures a cellophane glow
and the air is a mother on tiptoe
backing out of the bedroom.

Why do the things that left return
disordering everything,
like a colored ball
rolling out of nowhere?

I just took a rock and broke
the narcotic screen of water
remembering that lunatic
who opened his television with a blow
trying to take out the little man
that yelled inside.